El flusostato SFP cierra o desvía un contacto eléctrico cuando el caudal de agua que lo atraviesa alcanza el valor de calibrado superior (intervención), y lo restaura cuando éste disminuye por debajo del valor de calibrado inferior (restitución). Un par de imanes permanentes en mutua repulsión, uno alojado dentro del cuerpo del flusostato y otro externo, sustituye a la clásica solución con árbol y junta tórica, permitiendo un considerable aumento de la fiabilidad y la duración del flusostato.